EXISTEN LAS CASAS ENCANTADAS
Y sobre todo existen las casas habitadas por seres descarnados que se aferran su estructura física y se cobijan en ellas por que aun no han encontrado el camino, o por que les quedan asuntos pendientes que resolver.
Ocurre con las muertes repentinas, fuera de su tiempo. Un asesinato o un suicidio que rompe el equilibrio de una trayectoria preestablecida. La persona que abandona este mundo cuando aun no estaba previsto que así fuera se dice que permanece de alguna manera en el.
Los espíritus de las personas en ese trance necesitan ser escuchadas y atendidas por gente que sepa interpretar sus señales. A menudo se comunican por medio de sueños, ruidos leves, aromas o visualizaciones sutiles.
Cuando no los atendemos suelen lanzarse a cosas mas evidentes para que les prestemos atención como hacer caer pequeños objetos, golpear ventanas, crear corrientes de aire, o provocar a nuestros perros obligandolos a ladrar.
Nunca hacen daño físico. Nunca han golpeado físicamente a nadie.
Pero no es bueno tenerlos por el medio así que es mejor hacer que se vayan o por lo menos que no nos molesten.
Para ello, lo mas practico, es tener en algún rincón de la casa un recipiente con aceite y poner en algún día de la semana, con preferencia el lunes y nunca el sábado, unas lamparillas encendidas, al estilo antiguo, como hacían nuestras abuelas.
Ya sabes, las antiguas: pequeñas mechas rodeadas de cartón.
Si no las encuentras en las cererias, puedes hacerlas tu misma con redondeles pequeños de cartón y mecha extraída de alguna vela.
Cuando prendas las lamparillas procura que sea en numero impar. Una, tres, cinco…
Y hazlo encomendando a alguna persona de tu familia o algún amigo que este del otro lado y en quien confiasTe en vida que te ayude a encaminar a las almas que están en tu entorno.
Recuerdo en la casa de mis abuelos, ver en algún rincón de la cocina ese platillo de aceite que todos sabíamos que era el de “las almas perdidas”
Como sabes si hay alguna alma en casa?
Si lees con calma el post, tienes todos los detalles para deducir si hay un alma en tu casa.