COMO LLAMAR A NUESTRO ÁNGEL DE LA GUARDA
Desde el momento que nacemos todos tenemos un guía. Un Ángel que nos acompaña durante toda nuestra vida. Es nuestro compañero, nuestro amigo y su obligación es sembrar el camino de señales, de pistas y datos que nos pongan sobre aviso para que no corramos riesgos o cometamos errores. Los avisos son sutiles y como a menudo no nos conviene escuchar esas advertencias, no atendemos a ellos.
El Ángel no puede hacer mas, no puede intervenir en nuestras decisiones por que debe respetar nuestro libre albedrío, a no ser que pidamos su ayuda y le autoricemos en cada asunto concreto. Mientras, el Ángel tiene que contemplar, muchas veces, con desesperación (los ángeles también se desesperan) como tropezamos en las piedras mas visibles.
Basta con decir la palabra “ayúdame” y el nombre del ángel que según la tradición debe ser el tuyo pronunciado al revés. Por ejemplo de Rosamaria mi ángel se llama Airamasor.