Desde hace muchos años mantengo la costumbre de empezar la jornada invocando de manera muy sencilla a la diosa que gobierna ese día.

Cada mañana lo primero que hago es prender, durante unos minutos, la vela que corresponde, mientras me preparo para salir a enfrentarme con todas mis obligaciones y tareas…

Y para que me resulte más cómodo aún, tengo en un lugar de mi cuarto un candelabro de siete brazos con velas de cada uno de los colores de cada Diosa.

Encomendarles a las deidades en las que creo todos los acontecimientos y pormenores que aún están por acontecer es una manera de que, lo que el día me traiga, esté bendecido y amparado por la Diosa que gobierna esas veinticuatro horas.

Os Recuerdo que…

El lunes, es el día de Ariadna la Diosa de la Luna, la reina y su vela debe ser blanca o plateada.

El martes, es el día de Mórrigan, la diosa de la fuerza y su vela es la roja.

El miércoles, Aine estará de nuestra parte si encendemos su vela que es violeta o morada.

El jueves, Navia nos protegerá si prendemos la vela que le corresponde, la azul.

El viernes, es el día de la diosa Deva y su vela la verde.

El sábado, la diosa Epona estará atenta a nuestras necesidades si encendemos la vela marrón.

Y el domingo, le toca a Dana velar por nosotros cuando, encendemos la vela naranja o dorada que es la suya.

La magia a menudo está en las pequeñas cosas, en los sencillos homenajes con los que les decimos a las diosas:

– “Estoy aquí y sé que tú estás conmigo, que me acompañas y que me cuidas”.

Si te apetece tener uno de esos candelabros para que presida tu altar o algún rincón de tu casa los tienes en mi tienda de Vigo o en la tienda virtual, consagrados en mi altar, para que sean un soporte digno de las deidades a las que quieres convocar.

Este enlace te lleva directamente a ellos:

https://www.cosasdemeiga.com/103-candelabros-de-las-siete-diosas